Extrañas costumbres hay en todo el mundo, pero vinculadas al deporte, pocas sorprenden más que esta. En Indonesia, el fútbol no se juega del modo convencional que en el resto del mundo. Pues la atracción consiste en usar como balón un coco prendido fuego, para que los adolescentes que participen del juego demuestren su habilidad y valentía, con los pies descalzos.
Extraño, ¿no? Pues a lo largo del partido, se utilizan alrededor de 5 cocos, los cuales, quedan completamente inutilizables luego del juego. Y aunque parezca tarea fácil encender el coco, lo cierto, es que esto conlleva un gran procedimiento; puesto que previamente son embebidos en combustible durante dos días para de esta forma, tenerlos “a punto” en el campo de juego.
De esta manera, el juego comienza cuando todos corren descalzos por el campo de juego detrás del coco encendido, e cual va dejando líneas y manchas negras por todo el terreno.
Esta particular tradición, es muy popular entre los musulmanes del Este de Java, donde cada equipo se forma por cinco jugadores relacionando a su vez el deporte con el arte marcial “pencak silat”.
Sin embargo, es preciso señalar que para evitar las quemaduras de los adolescentes, cubren su cuerpo con una mezcla de hierbas. Aunque de todas formas, resulta muy llamativo e impresionante observar cómo los jóvenes juegan con el coco encendido cual balón de futbol estándar, haciendo las mismas maniobras que se realizan en el futbol “normal”. Sin embargo, hay otra particularidad que distingue a este juego, pues afortunadamente, no hay arqueros.
Vía: Infobae
Imagen: Oro Noticias